lunes, 9 de febrero de 2009

Portada "Nada Como El Amor"

Segundo poemario Nada Como El Amor (2006). Editado por Ediciones del Boulevard. El prólogo escrito por la poeta Clementina Herrador de Gaetán (Córdoba). La semblanza de contratapa pertenece a la Licenciada en Letras Modernas Marta Elena Nunciato (Córdoba) . Las ilustraciones de Tapa e interior son de la Profesora de Artes Visuales Andrea Roxana Rugnone (Bs. As.). La obra contiene 40 poemas de temática romántica

Prólogo:
Nada Como El Amor, es el segundo hijo espiritual del autor Darío Horacio Leiva. Páginas que estaban en el archivo de su alma en prístina luz. Darío elevó su pensamiento, abrió su corazón, le puso alas y se echó a volar. ¨La poesía es creación porque crea realidad¨ dice el gran poeta Roberto Juarroz, pero fundamentalmente poesía es una cuestión de vida. Para Darío, es una realidad, una necesidad de ser, una presencia, una búsqueda para sentirse pleno y desde sus versos llegar al corazón de todos y regalarnos un universo:
¨Soy peregrino que se detuvo antes tus ojos/
pájaro libre, condenado por tu amor¨.
Afirma el amor, la esencia de la vida, duplica cada día con matices del existir para encontrar al amor, al dolor que acrisola y redime. Navegando en su silencio construye su mundo poético; porque la palabra le abre las puertas de los sueños dictados desde su corazón y asi se expresa en su poema MUJER:
¨Gaviota de mis versos invisibles/
inquieta alegoría del amor/
paradoja desterrada del desierto/
galaxia de mi alado corazón¨.
Fluyen las palabras del autor, donde con filosofía existencial de lo vivido, sencillo, sincero, intimista, va desde el alma a otra alma:
¨Allí en tu corazón/
donde refugio siempre mis más audaces sueños/
donde bebo esperanza cuando agoto la mía/
allí está el manantial que devuelve mi aliento¨.
Pablo Coelho, manifiesta ¨donde está el corazón estará nuestro tesoro¨. Darío afirma el amor, la esencia de la vida y allí encuentra su mejor tesoro.
Córdoba, invierno del 2005 - Clemen Herrador de Gaetán - Directora de la revista Tiempo de Poesía

Contratapa:
La voz del poeta es canto, llamado, lamento. es manantial incapaz de detenerse por barreras de técnicas o preceptiva. Es semilla aérea que germina en nuestro ser porque es sólo latido, luz directa, sin recovecos.
Darío habla del amor como puede hacerlo un hombre que simplemente siente y encuentra en el lenguaje la arcilla para modelar lo inefable, la vida misma, inexpresable para muchos.
Aquí la poesía adquiere la fuerza leve del movimiento íntimo y dice aquello que hubiéramos anhelado expresar, buscando vanamente la musa que esquiva al profano y se entrega amante al que sabe seducirla, encarnarla.
La lírica popular o académica es un espíritu, una fuerza que abraza a algunos elegidos que saben capturar su universo sutil, más allá de lo concreto.
Pienso en Carriego, recuperado por Borges; siento entonces que Darío bebe de las aguas de la poesía con una inspiración popular, cotidiana, profunda, para definirse como ¨poeta urbano¨, ¨mundano cazador¨, ¨luz de neón¨.
Lic. Marta Nunciato

1 comentario:

Anónimo dijo...

Halle de casualidad este blog y la verdad es que me quedé asombrada por las imágenes y las palabras. Felicitaciones Sr. Leiva por su expresión poética, realmente nunca pensé que un policía pudiese escribir de esta manera. Que Dios lo bendiga.

Gabriela Moreno (Perú)